Me encanta que en mi casa se me trate como una mierda y nadie me haga maldito caso como si no viviera aquí. Es súper agradable que a una la despierten a las 3:00 de la mañana, que les digas que no hagan ruido porque estás durmiendo y que todavía al día siguiente te miren mal. Tampoco puedo opinar ya sobre las cosas de mi casa como por ejemplo la decoración porque se lo pasan por el forro completamente y aquí cada uno que haga lo que le de la gana. Eso si, menos yo. Mi casa es la casa de las fiestas, la guardería, el lugar al que venir a molestar... Y todo porque mi madre no está y como aparte de mis hermanos solo estoy yo y eso como que no importa, pues esta es la casa de repuesto para quien quiera venir a pasar el día, tarde y noche y hacer una fiesta. ME ENCANTA. Eso si, luego cuando pido que a las 3:00 de la mañana no se me despierte porque estoy durmiendo y me enfado soy mala gente, y cuando pido que no se cambie algo de sitio porque me hace falta en un lugar determinado y lo cambian y me enfado soy una antipática.

Qué ganas de independizarme y mandarlos a todos a la mierda.

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