Soy la única persona que después de que le expliquen las dudas le sigue dando vueltas al tema mil veces más y no contenta con eso me creo aún más dudas, y entro en un bucle de dudas y respuestas que llegan a las mismas dudas y preguntas una y otra vez. Me cansa. Es una paranoia que no puedo evitar. Es como hacerme sufrir a mi misma sin quererlo, como si esas dudas y respuestas tuvieran que existir a la fuerza para que siempre tuviera los pies en el suelo. No soy una persona que pueda vivir el momento sin más, sin pensar en lo que está pasando, pudo pasar o podría pasar. Lo que pueda pasar me da miedo.
Lo que duele no es el dolor.
“Lo que duele no es el dolor. El dolor es sólo una consecuencia. El efecto secundario de algo que nos hizo sufrir y que todavía hoy sigue haciéndolo. Me gustaría que esto que tanto duele fuese lo que me aplasta el pecho y me araña las vísceras y el corazón. Esto que se puede paliar poco a poco, con consejos, amigos, medicamentos, horas, sobremesas y tazas de té. Pero algo me dice que no. Que lo que duele no es el dolor.
Lo que duele no es el dolor. Lo que duele es la ausencia. El hueco que deja alguien que ya no está. Echar de menos con contrato indefinido. Y saber que quería llevársela y se la ha llevado, que ya está, que le han ganado la vida esas malditas seis letras que no pienso volver a juntar en mi boca nunca más.
Lo que duele no es el dolor. Lo que duele es conocer un vivo menos. Borrar su número del móvil. Tener que frenarme cuando la iba a llamar y recordarme a mí mismo que ya no puedo, que un día pude, que lo hice menos de lo que debía y que ya nadie podrá.
Lo que duele no es el dolor. Lo que duele es recoger los pedazos de quien se queda. No saber consolar a quien más quieres en este mundo. Tratar de estirarle los labios. Con una broma, un chascarrillo, una tontería. Fracasar.
Lo que duele no es el dolor. Lo que duele es la distancia. Este saberse lejos de ti, este llevarte conmigo, ese llevarme contigo y aún así, ser incapaces de llevarnos más. Haber caído con nuestro mayor triunfo. Haber sucumbido ante nuestro mayor logro. Lo mejor que habremos hecho en nuestra vida. Algún día él nos lo explicará.
Lo que duele no es el dolor. Lo que duele es no saber volverlo a intentar. Matar el nervio y dejar que se desangre la encía. Hablarlo tantas veces y acabarlas todas en ese silencio de punto final. Darnos por imposible. Constatar nuestra propia incompetencia. Seguir doliéndonos. Seguir mal.
Lo que duele no es el dolor. Es todo lo que dejamos atrás. El remolque desbocado de los recuerdos que nos perseguía al mismo ritmo y velocidad. Ahora sólo sabemos que le ha fallado el enganche, los frenos y no tenemos ni idea de en qué momento nos va a atropellar. Ni con qué.
Lo que duele no es ni siquiera llorar. Lo que duele es tener tantas razones para tener que hacerlo. Es esta maldita sequía de lágrimas. Es el miedo a quedarse solo y en pareja. Y esta cochina culpabilidad.
Lo que duele no es que la gente opine. Es que lo haga como quien habla del tiempo, alegremente y buscando de todo, menos ayudar. Que nos den consejos que no hemos pedido. Que inventen razones. Qué sabrán ellos. Qué sabrán.
Lo que duele no es el dolor.
Porque el dolor es esto que me viene aquí y ahora.
Lo que más duele es todo lo que vendrá.”
¿Cuándo dejará la gente de subestimarme? ¿Habrá alguien que realmente me llegue a conocer algún día o se tome en serio lo que digo? ¿Por qué me dejan sola cuando se sabe de sobra que no se me puede dejar sola en ningún momento y bajo ningún concepto? Todo acto tiene una consecuencia. Esta vez, entre que me han confundido con otra (¡gracias! ahora “Campanilla” tiene nombre y apellido) y que he encontrado aquí un catálogo de “pruebas irrefutables” de que ni soy especial porque para eso hace falta tener cierta exclusividad y digamos que carezco un poco de eso, además de que para que algo sea especial es necesario que no abunde, y digamos que de eso va más que sobrado. No me costó ni un mísero día enterarme sobre el tema. En fin, una vez más tengo que aguantar las tonterías y empeños de la gente en hacerme creer cosas que no son con lo que odio que me mientan. Cierto era cuando me dijo que no confiara en él. Otra vez vuelvo al punto 0 y otra vez me vuelvo a sentir como una más, tan normal y corriente como la anterior. Si fuera especial, como dice, ¿de qué me valdría serlo si así también tiene otras tantas? No tendría ni el más mínimo sentido tal nivel de estupidez. No se qué me duele más, si sentirme traicionada, que no pueda tener ni un mínimo de confianza en él, o que me sienta como una cualquiera. En tales casos, estoy tan acostumbrada a todo que ya ni lloro. No se si eso es bueno o malo. Como ya he dicho en otras ocasiones, la paciencia tiene un límite.
Sabía que esto me pasaría factura en cuanto llegué y que era un error venir. Me dice que yo no “boicotee” su vida, su privacidad y sus cosas pero me trae a un lugar que está marcado por todas partes como quien tiene mascota y lo mea todo para dejar huellas por todas partes (¡gracias nuevamente!). Y luego se extraña la gente de que no lleve a gente a mi casa, y que no me guste ni hacer ni recibir regalos. No se ha podido inventar una cosa más inútil que un regalo como señal de afecto o para recordar. Si alguien quiere recordar a alguien lo hace sin necesidad de mirar algún objeto regalado, y si alguien le quiere mostrar a alguien afecto también puede hacerlo sin necesidad de regalar nada. Un regalo útil podría ser una promesa, aunque también dicen que las palabras se las lleva el viento.
En todo tan triste… Debería existir algún lugar que te hiciera olvidar personas como en ‘Olvídate de mi’, aunque luego nos volvamos a unir por cualquier tipo de conexión que haya mucho más fuerte que cualquier otra cosa y nos volvamos a encontrar, pero sería otro momento, otras circunstancias, otras condiciones, que implicarían cambios en la relación. Tal vez no fuera lo mismo la segunda vez, o la tercera como sería este caso. Tal vez fuera muy diferente. Dicen que cuando una relación termina sin ser zanjada, sin una despedida, sino que se rompe sin más por cualquier tipo de motivo, no está rota y ni siquiera se ha terminado, solo que han desviado los caminos de cada uno para encontrarse más adelante en otro punto. Por otro lado, alguien me dijo una vez que cuando se tiene un elástico del que se tira y se tira por muy elástico que sea se llega a romper en algún momento.
En fin… Sigo con mi teoría de la paciencia, y que sea lo que la mente aguante.
“Dicen que a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores: uno con el que te casas o vives para siempre, puede ser el padre o la madre de tus hijos… Esa persona con la que consigues la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella… Y dicen que hay siempre, un segundo amor una persona que perderás siempre, alguien con quién naciste conectado, tan conectado que las fuerzas de la química escapan a la razón y te impedirán siempre, alcanzar un final feliz. Hasta que cierto día dejarás de intentarlo… Te rendirás y buscarás a esa otra persona que acabarás encontrando, pero te aseguro que no pasarás ni una sola noche, sin necesitar otro beso suyo o tan siquiera discutir una vez más. Ya sabes de quién que estoy hablando, porque mientras estabas leyendo esto, te ha venido un nombre a la cabeza. Te librarás de él o de ella, dejarás de sufrir, conseguirás encontrar la paz (será sustituido por la calma), pero te aseguro que no pasará ni un solo día en que desearás que este aquí para perturbarte. Porque a veces se desprende más energía discutiendo con alguien a quien amas, que haciendo el amor con alguien a quien aprecias.”
Paulo Coelho.
08/03/2012
Teniendo en cuenta lo que pienso y escribo ahora, leer la siguiente reflexión mía de hace dos años me da un poco que pensar, porque no es que piense diferente a ahora. Será que cambié hace ya mucho tiempo y estoy más "definida y caracterizada" de lo que pensaba.
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A veces en la vida te cruzas con algunas personas que por "H" o por "B" y mas allá de un físico, tienen algún encanto. Al mantener cualquier tipo de relación con esa persona descubres que te agrada bastante, tanto que eres un poco más feliz solo con su presencia. Al llegar a ese punto te das cuenta de que te importa, y poco a poco, a pesar de los innumerables defectos que tiene, solamente te encariñas de su faceta buena y hasta le encuentras unos pocos y simples detalles que te bastan para hacer que sea una persona muy especial.
En ocasiones dicha relación, independientemente del tipo que sea (amistosa, amorosa, fraternal…), sale como uno esperaba y aceptando esos miles de defectos que tiene, esa relación funciona bien. Pero hay veces donde esos miles de defectos pueden pasar factura con el tiempo. Un gesto que antes era increíble ya no luce tanto. Unas palabras que antes emocionaban ya no emocionan. Aquellas actitudes que antes llenaban de alegría pasan a ser indiferentes, incluso entristecen. Sin embargo, lo que antes te gustaba tanto todavía no te deja de gustar e insistes en demostrar que eres digno/a de recibir su atención y que vales para compartir mucho más con esa persona, pero esa persona tiene otra vida diferente a la que vive contigo, y quiere hacer otro tipo de cosas completamente ajenas a ti, ya sea por diversión, entretenimiento, porque uno de sus hobbies es fastidiarte, o simplemente no tiene una vida paralela a la tuya, pero eso es lo que creías tu y en realidad no le importas tanto como para formar parte de su vida. Aparentemente no hay problema alguno más que el de tus gustos y tu inocente forma de ver las cosas cuando quieres a alguien. Pero esa persona, como dije anteriormente, tiene defectos y puede que esos defectos no sean tan pequeños como aparentaban ser. Puede que uno de esos defectos sea no dejar las cosas claras desde un principio. Puede que sea el de jugar con los sentimientos ajenos. Puede que sea el de prometer cosas y no cumplirlas. Puede que tenga "la mano ligera". Puede que sea egocéntrico/a. Puede que sea el de mentir. Puede que sea el de despreocuparse de las personas que quiere porque se deja influir por terceros. Puede que sea negativo/a. Puede que prefiera las máquinas a las relaciones sociales. Puede que sea muy promiscuo/a. Puede que solo se preocupe en divertirse y nada más. Puede que quiera estar con muchas personas y le guste tener a otra gente de "reserva" por si algún día no encuentra a nadie más y se aburre. Puede que sea un/a interesado/a. Etc.
Suele pasar que eres un poco inteligente y decides ir por el camino más sano y zanjar la relación para evitar sufrir con estos defectos, pero también suele pasar que quieres tanto a esa persona que solo estando a su lado te basta para ser feliz. Eres consciente de que esos defectos de afectan de un modo u otro, pero todavía tienes aguante para seguir siendo feliz. Poco a poco te vas cansando, ya que a veces los defectos de la otra persona traen consecuencias y por m´s que te esfuerces en mejorar tu relación, no hacer caso de las malas costumbres, o hacer que esa persona cambie, no lo hace. Entonces el defecto pasa de ser defecto a ser error. Cuando alguien cree, o le interesa creer que le ha hecho daño a la otra persona pide perdón, pero no hay que olvidar que a esa persona por la razón que sea no le terminas de interesar. De esta forma cada cual estaría feliz: tu con la persona que quieres y la otra persona con todo lo que quiera. Aun así, esa persona seguirá haciendo lo que le venga en gana y seguirá manejándote a su antojo. Y eso de cometer un error y pedir disculpas se hará rutinario. Hasta que te cansas, reflexionas porque estas verdaderamente dolido o dolida y decides terminar con la relación (la que sea) porque te ha fallado durante tanto tiempo y que siendo sinceros, te ha tratado como basura, quedándome corta con el término.
Mucha gente al terminar de esta manera suele pensar que es idiota o algo parecido por haber estado con alguien que le trataba mal durante tanto tiempo, pero realmente lo que ha sucedido es que solamente te dabas por satisfecho/a con verle feliz, hasta que has empezado a valorarte un poco más y a darte la importancia que la otra persona no te daba o el respeto y la atención que merecías, y te has cansado. Entonces ves que esa persona no era tan especial y el único error por tu parte ha sido sobrevalorarle. Entre el enfado, el disgusto, la decepción y el resentimiento también se juntan otras ideas como las de "lo he pasado demasiado mal, ya no quiero conocer a nadie más" o "todo el mundo va a hacerme daño así que voy a pasar del resto del mundo" o algo similar. Todas las personas no son iguales, esa situación suele ser mas común de lo que uno se imagina y hay más personas en el mundo pensando igual que tu. Algunos, aún pudiendo haber pasado muchísimo dolor y habiendo sufrido tanto o más que tu, y siguen sin perder la esperanza de que hayan personas dignas de conocer y que no sean iguales a las personas defectuosas que han pasado antes por su camino.
Sin embargo algún día te volverás a encontrar con otro alguien que puede que te parezca igual o más especial que el anterior, y puede que te hayas vuelto mas exigente y tu caparazón imaginario no deje que otra relación pueda fluir porque con sus defectos o sus virtudes nunca se sabe si podría salir bien; o también puede ocurrir que esta vez solo te baste con quererle desinteresadamente, o que solo te baste con estar en el momento adecuado cuando haga falta, o solo te baste con que cuente contigo, o solo con ver que está bien y solo te baste con verle feliz para ser feliz…
Hay muchas veces en las que me gustaría dormir y no despertarme más, o al menos hasta que todo haya cambiado. Despertarme, ver a las personas que ahora me importa y mirarles como a simples conocidos. Como si no significaran nada. Despertarme y saber que tengo posibilidades de hacer algo con mi vida pero cerca de mi familia. Despertarme y mirarme al espejo sin asquearme ni odiar lo que veo. Pero sin envejecer.
No ver nada, ni a nadie, no ser consciente de lo que ocurre. Solo dormir.
¿Por qué la gente prefiere mentirle a la gente que quiere en lugar de buscar una alternativa de llevar una situación? ¿Por qué cuándo alguien quiere a otro alguien y sabe que hay X cosas que le hacen daño las hace? ¿Por qué dicen entender algo cuando luego no son capaces de ponerse en lugar del otro? ¿Por qué se empeñan en dar falsas esperanzas? ¿Para retener a alguien hasta que se encuentre otro alguien? ¿Qué se considera esfuerzo y aguante en una relación? ¿Se puede esperar algo de alguien que aún después de varios años sigue pensando y actuando de la misma manera? ¿Se puede volver a confiar en alguien que te ha fallado miles de veces incluso en los peores momentos de tu vida? ¿Se puede confiar en alguien que después de haberte dicho que ha cambiado vuelva a las mismas y te haya vuelto a fallar? ¿Se puede confiar en quien te dice que te quiere todos los días como si así lo demostrara? Etc.
Siempre me han dicho y he comprobado que las personas que te dicen que te quiere repetidas veces no son de fiar porque lo dicen con la intención de que te lo creas sin más, sin hacer otro tipo de esfuerzo, como si esos fonemas expresaran los sentimientos. Pero son simples letras. Algo de mi me dice que debería pasar de todo, cambiar el chip y mandarlo todo a la mierda. Por otra parte se que parte de su actitud ha cambiado, no es el mismo, es mejor, pero no me basta. Pero si no me basta no es porque no quiero que me hagan daño y porque quiero que me demuestren que me quieren cuando dicen que me quieren. ¿De qué vale que lo digan si luego me hacen daño conscientemente? Con cuidar un poco las formas y actitudes como hago yo bastaría. Siempre he sido obediente y cuidadosa con la gente que quiero, porque me gusta conservarla, las respeto, pero quiero lo mismo a cambio. No pido joyas, ni regalos, ni dinero... Solo quiero que me lo demuestren, y haciendo daño no es la forma. ¿Tan difícil resulta agradar a alguien a quien quieres tener en tu vida? A mi no me cuesta. Soy sincera, doy lo que puedo dar, incluso a veces ofrezco más de lo que tengo, o todo lo que tengo lo doy, aún sabiendo que me pueden hacer daño, pero cuando quiero ver a esa persona contenta me da igual.
Creo que es demasiado tiempo sin verle. Le quiero, mucho, pero no puedo dejar que nadie se burle de mi, que jueguen conmigo a su antojo y se aprovechen de lo que siento para salirse con la suya. Yo también tengo un límite. Creo que estoy enfadada y triste porque le quiero tanto que cada vez que me hace daño se reduce mi paciencia y me acerco más a ese límite, se me quitan las ganas de esforzarme, de contentar a nadie, de seguir "luchando" por tener algún tipo de "relación"... y no quiero. Cuando quiero seguir haciendo algo y me ponen impedimentos uno tras otro me agoto, pierdo la fuerza que tengo para hacer las cosas, se va la poca fuerza de voluntad que tengo y que empeño en hacer las cosas que creo que son más importantes para mi, como intentar conservar a quien quiero. Las relaciones con las personas son muy difíciles, y si es con él lo son muchísimo más. Pero yo sigo, como si algún día fuera a conseguir algo de lo que quiero porque soy imbécil. Y en realidad da igual, porque aunque lo sepa seguiré hasta que se agote mi paciencia. Ya pasó una vez, puede pasar otra, solo que esta vez intento ser más cuerda, menos visceral, más lógica, intento pensar con la cabeza y no con el corazón. Por eso puede que mi límite llegue aún más pronto de lo que esperaba, pero no quiero. No quiero que eso pase. Quiero ser otra, quiero que se me reconozca lo que hago, quiero que se pongan en mi lugar, quiero que respeten lo que me hiere y que intenten que esté cómoda, no pido ni que me hagan feliz siquiera, ni que me contente... Tan solo que no me haga sentir incómoda, ni que me haga daño. No creo que sea mucho pedir. Si no me conociera de nada, y yo tal y como me conozco, comprendería que fuera una tarea laboriosa, pero es una de las personas que más me conoce en el mundo. Para él no debería ser nada complicado. Unicamente no quiere hacerlo, y si no quiere hacerlo es porque tanta importancia no me da, o no me quiere lo suficiente como dice. Es triste pensar que en cinco años desde que me conoce haya tenido varias novias, y yo siga siendo el segundo plato que tenga que seguir currándoselo, cuando más que yo no lo ha querido nadie, y nadie ha dado más por él que yo. ¿Qué le han ofrecido ellas, o que tienen ellas que yo no tenga como para que hayan llegado a ese extremo y no yo después de cinco años? Creo que la respuesta está más que clara, y como está más que clara estoy segura de que yo no tengo nada que hacer haga lo que haga. Ni se me toma en serio, ni se me valora lo que debería, ni se toma en cuenta lo que aguanto, ni lo que doy, ni lo que hago. Eso me cabrea, me pone triste, me deprime y me quita las ganas de todo.
Está más que claro que el dicho "el que quiere puede" es una mentira como un templo, y el que la invento seguro que fue un idiota que tenía todo lo que quería sin esforzarse ni la mitad de lo que lo hago yo por las cosas que quiero.
En fin. Otra mierda de día de los que no se olvidan, o al menos yo que encima soy una persona rencorosa. Confiar, olvidar y perdonar es mucho más difícil cuando se trata de la gente que te importa y que quieres, sino no dolería tanto y tendría menos importancia. Cuanto mayor es el daño causado más grandes son los sentimientos hacia esa persona porque más importancia le das a sus actos, pensamientos y opiniones. Pura lógica.
¿Por qué en Google si la gente pregunta "cómo suicidarse sin dolor" o similares, solo hay respuestas de personas que se empeñan en evitarlo y decir lo bonita que es la vida en lugar de contestar a la pregunta?
De verdad, si encontrara la manera de morirme sin que me doliera ahora mismo ni me lo pensaba. Vivo en un país de mierda que cada vez es más mierda, en un lugar de mierda, con 22 años y sin haber trabajado nunca, con estudios sin valor ninguno, con un aspecto físico, mentalidad y forma de ser que ni me gusta, pero soy así y por más que me empeño no puedo cambiarlo. Me rodeo de gente que no me llena, ni me importa, y las personas que más me importan son las que más sola me hacen sentir. ¿Hay algo peor que estar y hablar con mucha gente y sentirte sola? Estoy completamente sola. Las únicas que me pueden hacer que me sienta acompañada son mi perra y la coneja, más triste imposible; y ellas también se morirán algún día. No tengo trabajo, no tengo dinero, no puedo independizarme, no puedo estar como quiero con la gente que quiero, no puedo ser como quiero, no puedo hacer lo que quiero, y lo peor de todo es que no veo que eso cambie ni de aquí a 10 años, y eso que ya esperar 5 años son más que suficientes. Mi vida es una completa mierda y quiero morirme. Encima queda lo que no está escrito para que llegue verano, y seguro que cuando llegue verano estaré encerrada en mi casa porque hará mal tiempo, no tendré un puto duro en la cartera, o cosas similares como todos los putos años de mi vida. Y luego dicen que los ricos son la gente que está más triste. La gente cuando dice eso está flipando porque ¿qué es peor que una persona rica y que sea infeliz? Fácil, una persona pobre e infeliz. El dinero lo da absolutamente todo porque estamos en esta mierda de lugar capitalista y aquí sin dinero no eres nadie porque el dinero cambia hasta a las personas, cambia el físico, la mentalidad, las relaciones, la calidad de vida... Que me digan a mi que el dinero no da la felicidad... ¿Hay otras cosas en la vida como el amor, la amistad y esas chorradas? Probablemente si, pero vuelvo a lo mismo, ¿de qué sirve? ¿de qué? si es que ni eso tengo, no me cae bien la gente, cada vez me da más asco la gente y le doy menos importancia a la familia porque ni esos están ni en las buenas ni en las malas. Ya no es que estén en las malas solo, sino que tampoco están ni en las buenas ¿por qué? Porque no hay buenas. Vaya mierda de vida. Ya podrían venderse inyecciones con lo que quiera que sea que le ponen a los animales para que se mueran sin sufrir, así se suicidaría más gente y no habría problema de depresiones, ni enfermedades, ni gente que sobra, ni muchos más problemas que hay hoy en día por haber más gente de la que debería.
Que asco de verdad... Ojalá encuentre la manera y me salga bien de una vez.
Me han dicho que cuento las cosas como si se las contara a personas con deficiencia mental (para ser más fina), es decir, si ya de por si todo lo que escribo aquí me parece ridículo, ahora que dicen que las cuento de manera estúpida y encima para nadie más inútil, ridículo y estúpido me parece todo esto. Pero como el ser humano es inútil, estúpido y ridículo por naturaleza, aunque también sea muy astuto, perspicaz e inteligente (por decir algo bueno), necesita tener algún método de desahogo y el mío es hablar sola pero como hablando sola la gente me ve y cree que estoy loca o se ríe de mi pues lo escribo.
Las personas son tan imbéciles que se quejan de las cosas que siguen haciendo, yo incluida.
* Dato aportado por Christian: una persona con hambre solo puede ingerir como máximo una cuarta parte de una lata común de paté, sin ningún otro tipo de alimento como complemento o acompañamiento.
¿Por qué hay que escribir las cosas en el momento en que se piensa? Porque si lo haces mas tarde te puede condicionar la situación, personas, emociones, actitudes, etc y cuando lo vas a escribir lo haces desde otro punto de vista diferente inconscientemente. Lo que ayer parecía un buen día por algún tipo de acontecimiento que pase posteriormente te puede parecer un día malísimo.
Creo que es hora de ir pensando en las distancias y acortar las confianzas y relaciones. Ojalá no le hubiera conocido nunca. Pero como ya no se puede dar marcha atrás porque lo hecho, hecho está, hay que seguir para adelante como una imbécil más de esta mierda de mundo que no tiene ni pies ni cabeza.
Por lo visto perritos falderos somos todos y no se escapa nadie. Entre decepciones, mentiras, comentarios y a base de insistir el algo que no pasará me termino aburriendo, y eso que tengo la paciencia y el aguante más grande que puede tener una persona, pero me agoto, me canso. Cuando me canso me olvido de las cosas que realmente me importan porque dejan de tener sentido. Cuando me olvido de lo que realmente me importa soy menos vulnerable, por lo tanto más fuerte, y peor persona a la vista de los demás. Me frustro y soy desagradable y más antipática de lo normal.
Prefiero ser una ignorante que vivir a base de golpes uno detrás de otro. Me suelen decir mucho que parezco un gato por muchas cosas, a ver si es cierto y solo tienen siete vidas, y con suerte me quedan pocas...
Y aún asi... Nunca he soportado la idea de que las cosas buenas se acaben en algún momento. Por una parte preferiría evitar estas situaciones y ser una especie de emo. No se puede echar de menos algo que no se conoce por lo cual no se acabará, por lo cual no existirá un sentimiento de culpa o lamentación. Por otra parte siempre he pensado que preferiría vivir muy bien por poco tiempo y morir joven a estar pasándolo mal y sobrevivir a disgusto toda la vida. ¿A quién no le gustaría vivir como le diera la gana absolutamente aunque sea con la condición de vivir menos? Encima tiene sus ventajas porque no tendría que verme mayor y vieja en ningún momento, idea que también me supera. Cada vez pienso más en que morir pronto no es tan malo. Al menos ya me voy haciendo a la idea.
Estaría bien apuntar lo que se hace cada uno de los días del año y luego leer las 365 entradas, como mínimo, escritas. Sería un buen recordatorio con todo detalle de como aprovechas un año de tu vida, lo que piensas y el por qué.
Odio hacer retratos. No me gusta, no lo hago por placer. Me gustaría hacerlo por placer, como antes.
No se por qué no siento ningún tipo de remordimiento, ni pena... Siento remordimientos pero por otra causa. Al estar con alguien sueles hablar de otras personas con las que has estado, o al menos de las personas que más importancia han tenido en cuanto a relaciones sentimentales se refiere. Se suele sacar toda la rabia, el rencor, odio, resentimiento, o cualquier otro tipo de sentimiento negativo que uno tiene hacia esas personas en forma de burla o crítica. Algunos/as hacen una versión más "personalizada" de la historia y la convierten en una nueva dándole algo más de dramatismo del que ya tenía (si es que lo tenía, no vamos a quitarle el entusiasmo a la persona que lo narra). Personalmente, nunca suelo decir nada que sea mentira ni dramatizo más de lo justo y necesario una escena o historia, a no ser que tenga un fin determinado y necesite hacerlo (si se dice, se dice todo). Al contrario le quito importancia, y no solo le quito importancia, sino que omito mi punto de vista, así que soy objetiva y solo digo los hechos tal y como los he vivido para que la persona receptora le de la emoción e importancia que considere necesaria. Así se conoce mucho a una persona porque te deja ver su primera reacción, su forma de pensar, de ver las cosas, etc. Pero para esto hay que saber contar las cosas y no influirle mucho ya que tu actitud condiciona otra.
Al contarle mis "batallas" con un ex-novio "amigo" a otro actual ex-novio, que para ese entonces no lo era, este se mostraba frustrado, cabreado, triste, furioso, sentía lástima y a la vez se "autopersonalizaba" con el rol de guardaespaldas. "¡Qué cabrón! ¡Si lo veo por la calle lo mato! ¡Hay que ser gilipollas! ¡Qué asco de gente!", etc. decía él, y yo pensaba "eres un hipócrita, tu eras otro cabrón, de hecho lo sigues siendo, me abandonas en mitad de la noche en una calle de un lugar que no conozco con gente rara, me gritas, me insultas de mala manera, me tiras cosas, te muestras muy agresivo conmigo, me dices tan tranquilamente que me volverías a dejar sola mil veces, que si me han pegado es porque me lo he merecido, que tendría que haberlo pasado mucho peor, y una serie más de las que considero burradas teniendo en cuenta el tipo de relación de pareja formal y estable que tenía con el que era mi novio. Al pensar en todo este tipo de situaciones y escenitas me planteo una cosa, ni los malos son tan malos ni los buenos son tan buenos. Los remordimientos que si siento de los que hablaba antes, vienen precisamente por eso. Es raro, es difícil de explicar o entender, pero es así. No debí pensar "X" cosas buenas o malas de una persona porque después de todo que a quien tienes por la peor persona del mundo resulta ser alguien normal o increíble y a quien tienes por una muy buena persona al final es otro capullo más del montón, y todo esto es debido a que la gente cambia o si no es el caso, puede ser por no conocer suficiente a la persona o porque simplemente es un hipócrita o un mentiroso.
Con esto quiero llegar a que no es bueno arrepentirse de las cosas porque se hacen o se piensan en un determinado momento por un determinado motivo, y que todo puede cambiar. No por eso hay que ser adivino y tomar una decisión siempre pensando en que a lo mejor te puedes arrepentir o en qué consecuencias te puede traer dentro de mucho tiempo, pero si hay que hacer las cosas pensándolas y nunca hay que "escupir para arriba" como se suele decir, porque nunca se sabe de que manera van a cambiar las cosas o si cambiarán en algo. Por eso no hay que subestimar la manera de narrar algo que ha pasado de verdad, puede que en el momento exageres al contar una historia, puede que se maquillen un poco los hechos de lo que verdaderamente pasó, y de eso si que te puedes arrepentir algún día. Porque puede que dejes por los suelos a alguien en un determinado momento solo por buscar un poco de apoyo de una manera no adecuada, y luego te arrepientas.
Dicho esto cada día intento ser más sincera conmigo misma y ser menos hipócrita, intento reconocer mis fallos, corregirlos, no tener más paciencia de la que debería, ser más clara con el resto de humanos (si, es un poco irónico), y bueno... en general mejorarme para ser la persona que me gustaría ser (ojalá...).
- No como pescado.
- ¿Por qué no?
- Los peces hacen pis en el agua.
- Los niños también.
- Tampoco como niños.
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- Me enamoré de ella Alice.
- Ya, como si no tuvieras elección... Hay un momento, siempre hay un momento. ¿Puedo hacer esto?, puedo dejarlo llevar o resistirme. No se cuando tuviste ese momento pero seguro que lo tuviste.
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Mentir es lo más divertido que una chica puede hacer sin desnudarse, pero es mejor si se desnuda.
Closer.
Bueno, ya estamos en el 2014. La entrada de año no ha estado del todo mal. Tengo que reconocer que el último día del año y el primer día del año no estuvieron muy bien que digamos, pero ya el segundo día la cosa cambia. Y ahora después de pasarlo bien y esas cosas viene el estrés de nuevo y tengo que recuperar el tiempo perdido (porque lo he perdido mucho estás vacaciones) y me tengo que poner las pilas con las dichosas cosas de clase que hacen que cada vez me quiera dar más de baja en el ciclo. Necesito más vacaciones. Encima este mes es mi cumpleaños y con solo de pensarlo me pongo a temblar. 23 años... ¡qué mal! Me estoy haciendo mayor muy pronto para mi gusto. El problema no está en hacerse mayor, el problema está en que a medida que te vas haciendo mayor quieres ir consiguiendo unos objetivos en tu vida y yo me estoy haciendo mayor sin haberlos conseguido. Es como ir de camino a los 30 sin tener la ESO. No te sientes bien en cuanto a la relación edad-vida que tienes o llevas. En fin... A ver si al menos, este año adelantamos eso un poquito y conseguimos más cosas que parece que estos dos o tres últimos meses me voy viendo algún progreso.
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